Por Eduardo Bertoni
¿Qué diríamos si un funcionario de la Comisión Nacional de
Comunicaciones se presentara ante la empresa que nos provee servicios de
Internet y solicitara información sobre el contenido de nuestros
correos electrónicos? Sin duda, deberíamos manifestar nuestro rechazo.
Pues bien, a partir de la resolución 5/2013 de la Secretaría de
Comunicaciones, esa posibilidad queda totalmente habilitada. Las
violaciones de garantías individuales, de llevarse a la práctica la
resolución, son muchas, por lo que esa norma debería revisarse de manera
urgente.